Después de París, los tribunales
Los ciudadanos tienen un papel protagónico que jugar para asegurarse el cumplimiento de los acuerdos derivados de la Cumbre de París 2015 ya que, a pesar de la importancia de lo que allí se suscribió, no se incluyeron —por ahora— penalizaciones legales que obliguen a las naciones a cumplir sus metas de reducción de emisiones. Tal vez por eso muchos ambientalistas creen que ahora le toca el turno a la justicia, lo que significa que los gobiernos de los países que no cumplan con los compromisos podrán ser llevados a juicio por sus propios ciudadanos, lo cual si bien no es común, tiene antecedentes. En efecto, a mediados del año pasado, el grupo ambientalista holandés Fundación Urgenda, abrió un camino hasta entonces insospechado: lograr que un tribunal de la Haya sentenciara a favor de casi 900 ciudadanos que 2 años antes habían introducido una denuncia donde le exigían al gobierno incrementar sus esfuerzos de reducción de emisiones. El juez dictaminó, efectivamente, que el p