Sensores inteligentes para salvar los mares
Las aguas de los océanos se están acidificando aceleradamente. En los últimos 200 años, los mares del mundo han absorbido aproximadamente el 30% de todo el CO2 liberado a la atmósfera por los humanos desde el inicio de la Revolución Industrial, lo que ha causado un aumento de más del 26% de la acidez de sus aguas debido al ácido carbónico que se genera, un ritmo de cambio del balance químico sin precedentes en la historia geológica del planeta. Esa acidificación no sólo provoca cambios en los ecosistemas y en la biodiversidad marina, sino que afecta la seguridad alimentaria y, sobre todo, limita la capacidad del océano de seguir absorbiendo el CO2 procedente de las emisiones antropogénicas, gracias a lo cual han disminuido considerablemente las repercusiones de ese gas de efecto invernadero en el clima. Aunque la ciencia actual no está aún en condiciones de predecir exactamente cómo la acidificación afectará las conexiones entre los muchos organismos marinos del mundo, sí e